ENTREVISTA EXCLUSIVA CON NECROFURY: ¡EL THRASH NO ESTÁ MUERTO, CABRONES, Y LO VAMOS A DEMOSTRAR!
¡Atención, metaleros de mierda! Bienvenidos a otra descarga brutal en STHD Metal, el blog donde el metal no solo vive, sino que te escupe en la cara y te hace headbanguear hasta reventar! Hoy tenemos algo que os va a dejar con los huevos por el suelo: una entrevista exclusiva con Necrofury, la banda de thrash metal que está rompiendo cuellos desde las entrañas de Barcelona. Con su último pepinazo, Bloodstorm Apocalypse, han desatado un huracán de riffs y caos que nos tiene a todos gritando como posesos. Nos colamos en su local de ensayo, un antro que huele a birra derramada, sudor y cables quemados, para charlar con Javi "El Carnicero", el vocalista y guitarra líder que parece que te va a arrancar la cabeza con cada grito, y Marta "La Trituradora", una batería que golpea los parches como si estuviera derribando un edificio. Coge una Estrella bien fría, sube el volumen y prepárate para una charla que es puro fuego. ¡Esto es thrash metal en vena, cabrones!**
STHD Metal: ¡Hostia puta, tíos, qué honor teneros aquí! Bloodstorm Apocalypse es un jodido misil, cada tema es como un puñetazo en la cara. ¿Cómo coño habéis parido este discazo?
Javi "El Carnicero": ¡Gracias, cabrones, eso es lo que queríamos! Este disco salió de pura rabia, ¿sabes? Estábamos hasta los cojones de tanta mierda comercial y queríamos algo que fuera auténtico, algo que te reviente los tímpanos y te haga querer romper una silla contra la pared. Nos metimos en un local en el Raval que parecía un puto zulo: paredes desconchadas, un sofá que olía a meados y un ampli que echaba más humo que un dragón. Allí, con un pack de birras y un montón de odio acumulado, empezamos a sacar riffs como si nos fuera la vida en ello. Las letras salieron solas, hablando de este mundo podrido que nos rodea. Es thrash puro, sin mariconadas ni filtros, ¡como tiene que ser!
Marta "La Trituradora": ¡Exacto! Yo quería que cada golpe de batería sonara como una jodida explosión. No usamos mierdas de overdubs ni retoques, todo en directo, crudo y directo a la yugular. Quería que sintieras el caos de un mosh pit aunque estuvieras escuchando el disco en tu cuarto. Imagínate: yo aporreando los parches con las baquetas desgastadas, Javi gritando como un poseso mientras el ampli chirría, y el aire cargado de olor a cerveza y tabaco. Eso es Bloodstorm Apocalypse: un puto apocalipsis sonoro.
STHD Metal: ¡Se nota que lo vivisteis a tope! Hablando de caos, contadnos, ¿cuál ha sido el concierto más salvaje que habéis dado con este álbum?
Javi: ¡Joder, hay uno que no olvidaremos nunca! Fue en Madrid, en un garito clandestino que parecía que se iba a caer a pedazos. El suelo temblaba con cada riff, la peña estaba desatada: tíos volando por los aires, vasos de birra cayendo al suelo, y un mosh pit que era puro caos. En un momento, se rompió una viga del techo porque la gente no paraba de saltar como locos. ¡Caían trozos de yeso y nosotros seguimos tocando como si nada! Cuando acabó el bolo, nos echaron del local y terminamos en la calle, bebiendo y cantando letras hasta las tantas. Olía a sudor, a cerveza agria y a libertad. Fue una noche de las que te recuerdan por qué vives para el metal.
Marta: ¡Sí, y yo casi me cargo la batería de tanto darle caña! Había un momento en “Thrash Till Collapse” que el bombo sonaba como un puto terremoto, y veía a la peña en primera fila con los ojos inyectados en sangre, gritando y empujándose. Esa es la magia del thrash: si no hay caos, no es un concierto de verdad. La peña se fue con moratones, camisetas rotas y una sonrisa de oreja a oreja. ¡Eso es lo que mola!
STHD Metal: ¡Eso es un concierto como Dios manda, hostia! Ahora, contadnos un poco sobre vosotros. ¿Qué os metió en el rollo del metal y cómo acabasteis formando Necrofury?
Javi: Yo me crié con los casetes de mi hermano mayor: Slayer, Metallica, Sodom… Esa mierda me voló la cabeza desde crío. A los 14 ya estaba aporreando una guitarra vieja que encontré en un trastero, y a los 18 monté mi primera banda con unos colegas del barrio. Pero Necrofury nació hace cinco años, en un concierto de Kreator. Marta y yo estábamos en primera fila, sudando como cerdos y gritando hasta quedarnos sin voz. En un momento, nos miramos y dijimos: “Hostia, tenemos que montar algo juntos”. Y así empezó todo.
Marta: ¡Sí, fue un flechazo metalero! Yo llevaba años tocando batería en bandas de punk y death, pero el thrash siempre ha sido mi pasión. Cuando Javi me enseñó los primeros riffs, supe que esto iba a ser algo gordo. Luego se unieron el bajista “Lobo” y el guitarra rítmica “Destructor”, y desde entonces somos una jodida familia. Nos peleamos como perros, pero cuando subimos al escenario, todo encaja y hacemos temblar el suelo. El local de ensayo es nuestro campo de batalla: paredes llenas de pósters de bandas, un sofá que parece sacado de un vertedero, y un aire que apesta a cerveza y cuero. Ahí es donde nace la magia.
STHD Metal: ¡Se nota que sois puro metal! Ahora, una pregunta clásica: ¿cuál es la anécdota más loca que os ha pasado en la carretera?
Marta: ¡Hay tantas, joder! Pero me quedo con una noche en Valencia. Habíamos terminado de tocar y nos fuimos a un bar cutre a seguir la fiesta. Estábamos tan pedo que Javi se subió a la barra a cantar “Angel of Death” a pleno pulmón, con la peña coreando como si fuera un puto ritual. De repente, apareció un tío vestido de cura que se puso a hacer crowdsurfing encima de las mesas. ¡Resulta que era un fan de la banda que se había disfrazado para liarla! Al final, acabamos todos en la playa, cantando y bebiendo hasta que salió el sol, con el sonido de las olas mezclándose con nuestros gritos. Fue una locura total.
Javi: ¡Sí, y el “cura” ese ahora es nuestro roadie oficial! El cabrón lleva una cruz invertida tatuada en el pecho y carga los amplis como si fuera el mismísimo Satán. Esa noche fue pura magia: el aire salado, el olor a birra, las risas y los cánticos. Esas son las cosas que te recuerdan por qué haces esto.
STHD Metal: ¡Qué pasada, tíos! Para ir cerrando, ¿qué le diríais a los chavales que están empezando en el metal, ya sea tocando o como fans?
Javi: Que no se dejen engañar por las modas y las mierdas que te quieren vender. El metal es actitud, es vivir a tu manera y mandar a tomar por culo a quien te diga cómo tienes que ser. Si tocas, hazlo con el corazón, no con la cabeza. Y si eres fan, apoya a las bandas pequeñas: ve a conciertos, compra discos, métete en el mosh pit y grita hasta que te sangre la garganta. El metal se mantiene vivo gracias a vosotros, ¡así que a dar caña, cabrones!
Marta: ¡Totalmente! No tengáis miedo de ser vosotros mismos. El metal es un espacio donde puedes ser un bicho raro y sentirte en casa. Subid el volumen, romped algo y vivid el thrash como si no hubiera mañana. Necrofury os estará esperando en el próximo bolo para daros una buena hostia sonora. ¡Nos vemos en el pit, hijos de puta!
STHD Metal: ¡Palabras que son pura dinamita! Gracias por esta charla, ha sido un puto placer. ¿Qué tenéis planeado para el futuro?
Javi: ¡De nada, cabrones! Ahora mismo estamos preparando una gira por Europa que va a ser una masacre total. Queremos llevar Bloodstorm Apocalypse a cada rincón donde haya metaleros con ganas de liarla. Y ya estamos componiendo material nuevo, porque no paramos ni un segundo. ¡El thrash no está muerto, y Necrofury va a seguir dando guerra hasta que nos revienten los tímpanos!
Marta: ¡Eso es! Y a los lectores de STHD Metal, deciros que os queremos ver en primera fila, sudando y gritando con nosotros. ¡Nos vemos en el pit, hijos de puta! 
STHD Metal: ¡Y ahí lo tenéis, cabrones! Necrofury ha Old School, puro thrash metal en estado salvaje. Si no habéis escuchado Bloodstorm Apocalypse, ¿a qué coño estáis esperando? Id a https://sthdmetal.blogspot.com/ para más entrevistas, reseñas y todo lo que necesitas para mantener el metal ardiendo en tu jodida alma. ¡Larga vida al metal, y a darlo todo! 
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