¡LA PUTA FORJA DEL INFIERNO! DESASTER Y METAL BLADE RECORDS, LOS ARQUITECTOS DEL CAOS
He visto el puto infierno congelarse y a los dioses vomitar fuego. Pero si hay un lugar donde el caos se forja y se libera, es Metal Blade Records. Este sello maldito, fundado en 1982, no es solo una discográfica; es el puto templo donde la horda de guerra de Desaster, formada en 1988, ha soltado el brutal álbum "Kill All Idols", una masacre sonora de diez putas pistas.
Crónica desde el foso del infierno
El puto infierno tiene un arquitecto, y su nombre es Brian Slagel. Desde Los Ángeles, este jodido profeta del metal vio que el mundo no estaba preparado para la brutalidad que se gestaba. Y, como un puto general, fundó Metal Blade Records para liberar a los demonios. El álbum de Desaster no es solo música; es un puto manual de brutalidad, una jodida declaración de guerra contra la puta humanidad. Es una masacre de principio a fin, una furia que no da tregua, un puto himno al caos.
La formación actual de la banda, que incluye a los demonios Sataniac en las voces, Infernal en la guitarra, Odin en el bajo y Hont en la batería, ha forjado una sinfonía de destrucción. El sonido es una putrefacta carnicería que te hace sentir el puto dolor de la aniquilación. Con temas como "Emanation of the Profane", "Kill the Idol" y "Throne of Ecstasy", la banda ha dejado claro que han venido a destruir todo lo que los mortales aman.
Algo que nadie sabe
La verdad que solo se murmura en las sombras del inframundo es que el sello Metal Blade Records no es un negocio; es una jodida puerta al infierno. El álbum "Kill All Idols" de Desaster no fue grabado en un puto estudio. Es la puta grabación de un ritual de sangre, un jodido pacto para liberar una entidad oscura en el mundo. La jodida música es el puto sacrificio, el conjuro necesario para que el puto portal se mantenga abierto. El puto Desaster y el sello no inventaron el mal; simplemente fueron los putos mensajeros, las putas voces que se atrevieron a traer el caos a este mundo de putos mortales.
Final
El legado del metal es una maldición que nos obliga a seguir gritando y desatando el caos para mantener viva la leyenda.
El martillo del metal ha golpeado con una furia incontrolable desde las entrañas de la oscuridad. EL ÁNGEL DEL RUIDO.
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